Recursos Para Los Ultimos Días

Texto: 2 Timoteo 3:1­-17

Versículo clave: “Toda la Escritura es inspirada por Dios, y útil para enseñar, para redargüir, para corregir, para instruir en justicia, a fin de que el hombre de Dios sea perfecto, enteramente preparado para toda buena obra”. 2 Timoteo 3:16, 17

No debemos desanimarnos por la creciente maldad en el mundo sino que debemos invertir más tiempo y energía aprendiendo y aplicando la inspirada Palabra de Dios.

UN VISTAZO PRELIMINAR

Al introducir este pasaje, Pablo usó la frase postreros días. Esta frase también se usa en otras partes de la Biblia. Una perspectiva general de todas las formas en que se ha usado nos llevaría a concluir que éste era un periodo que comenzó con el ministerio de Jesús y concluirá cuando se cumplan los eventos que rodean su segunda venida (Hb. 1:2; Hch. 2:17).
Este periodo estuvo marcado por las dos señales seguras del amor enfriado y de la maldad multiplicada. Nuestra esperanza viene de dos enseñanzas dadas en la Palabra de Dios. Primero, sabemos que el aumento de maldad nos acerca más y más a la venida de nuestro Señor. No interprete que esto significa que debemos querer que el pecado abunde. Jamás es correcto hacer lo malo.
La segunda fuente de esperanza es que Dios nos ha provisto una forma para manejar nuestros problemas. En 1 Corintios 10:13 leemos que Dios siempre proveerá una forma para que sus hijos escapen aunque las tentaciones y las pruebas puedan ser severas. Para el creyente esa ruta de escape puede ser la muerte misma. Puede que muramos en defensa de la verdad, pero seremos recibidos en gloria, y nuestros problemas se habrán acabado.
Mientras Pablo escribía estas palabras estaba enfrentando la muerte por crímenes que jamás había cometido. Él podía ver alrededor en Roma, bajo Nero, y ver muchos ejemplos de las cosas que él había profetizado. Él sabía que todo lo que estaba sucediendo estaba dentro del control de Dios, y siguió siendo fiel. El conocimiento preciso nos dará la esperanza en cualquier situación que nos atribule.

UNA MIRADA MÁS CERCANA

I. Tiempos peligrosos
2 Timoteo 3:1-­8

1. También debes saber esto: que en los postreros días ven­drán tiempos peligrosos.
2. Porque habrá hombres amadores de sí mismos, avaros, vanagloriosos, soberbios, blasfemos, desobedientes a los padres, ingratos, impíos,
3. sin afecto natural, implacables, calumniadores, intemper­antes, crueles, aborrecedores de lo bueno,
4. traidores, impetuosos, infatuados, amadores de los deleites más que de Dios,
5. que tendrán apariencia de piedad, pero negarán la eficacia de ella; a éstos evita.
6. Porque de éstos son los que se meten en las casas y llevan cautivas a las mujercillas cargadas de pecados, arrastradas por diversas concupiscencias.
7. Estas siempre están aprendiendo, y nunca pueden llegar al conocimiento de la verdad.
8. Y de la manera que Janes y Jambres resistieron a Moisés, así también éstos resisten a la verdad; hombres corruptos de entendimiento, réprobos en cuanto a la fe.

Se deben observar dos cosas sobre el periodo llamado los postreros días. Primero, estos serán tiempos peligrosos. Esta palabra expresa la idea de dificultad, aún situaciones violentas difíciles de enfrentar. Esta no es una vida ordinaria; más bien es un tiempo de gran prueba y tribulación. Segundo, nosotros debemos observar la conclusión para el cristiano. Tenemos que identificar a los que están haciendo el mal y alejarnos de ellos.
Esto no significa que nos debamos negar a extendernos en amor con el evangelio, a los hombres del mundo entero. Significa que debemos guardar una pared de separación de estas prácticas. Lo que aquí se describe es la naturaleza adámica. Esta naturaleza está en todos nosotros y cualquiera puede fácilmente acceder a este punto de vista de la vida distorsionado y tergiversado.
Al menos hay diecinueve manifestaciones de la naturaleza adámica mencionada aquí. Todas se basan en la primera. Cuando los hombres, y esto incluye mujeres y niños, se aman de sí mismos en lugar de amar a Dios, seguirán todas las demás degradaciones. El egoísmo o el amor propio es lo opuesto al amor piadoso. Dios ama a otros; el hombre carnal se ama a sí mismo. Aplique este principio y fácilmente verá como la mala conducta fluye de esta filosofía imperfecta.
El amor propio salta a la codicia, o al amor al dinero y a las cosas. Progresa hasta llegar al amor al placer y aún a la exclusión del amor a Dios. De camino, este amor descubre las terribles características mencionadas en estos versículos. Analícelos y verá que fluyen de un amor propio.
Observe que estos individuos son religiosos. Tienen una forma de piedad, pero se niegan a cambiar por el poder de lo que saben. Quieren la respetabilidad de la religión sin el efecto del cambio de la vida del evangelio. Quienes realmente son salvos son nuevas criaturas. Las cosas viejas pasaron y todas son hechas nuevas. Estas personas engañadas han adoptado la forma de piedad, pero todavía tienen la naturaleza vieja o carnal.
Buscan influenciar a los incautos. La referencia a las mujercillas no sugiere que todas las mujeres sean así ni fácilmente engañadas; pero hay algunas mujeres y algunos hombres que son así, y estos pobres son terreno fértil para el engaño de una doctrina basada en el amor propio. Observe honestamente muchas de las filosofías de nuestro día y verá que se basan en el concepto de amarse a sí mismo primero y por encima de todo.
Tal conducta tiene precedente. En los días antes del éxodo, dos egipcios magos Janes y Jambres resistieron a Moisés.
Imitaron las cosas que Moisés hizo y pudieron hacerlo hasta cierto punto. Pero rápidamente se llegó el momento cuando estos dos fueron expuestos por lo que eran. La tragedia ver-dadera de la religión falsa es que no funciona. La religión falsa no salvará su alma y no bendecirá su vida. Será expuesta así: sin ningún valor ni utilidad.

II. Un patrón para seguir
2 Timoteo 3:9-­13

9. Mas no irán más adelante; porque su insensatez será man­ifiesta a todos, como también lo fue la de aquéllos.
10. Pero tú has seguido mi doctrina, conducta, propósito, fe, longanimidad, amor, paciencia,
11. persecuciones, padecimientos, como los que me sobre­vinieron en Antioquía, en Iconio, en Listra; persecuciones que he sufrido, y de todas me ha librado el Señor.
12. Y también todos los que quieren vivir piadosamente en Cristo Jesús padecerán persecución;
13. mas los malos hombres y los engañadores irán de mal en peor, engañando y siendo engañados.

Algo que tenemos que comprender sobre la doctrina falsa y quienes la practican es que está limitada en el tiempo. No puede durar hasta la eternidad. Cuando los hombres mueren, la verdad se revela y la tontería del amor propio es obvia para todos, aún para los que practican el mal.
El egoísmo siempre es tentador, y para librarse de él necesitamos un ejemplo positivo a seguir. Pablo literalmente está llamando a Timoteo de vuelta a sus raíces. Pablo le recuerda a su joven predicador, Timoteo, que su vida ha sido un libro abierto. Pablo enumera ocho áreas de su vida que eran prueba de que amaba la causa de Cristo más de lo que se amaba a sí mismo.
Poniéndolo de manera sencilla, nosotros demostramos que amamos a Jesús cuando venimos a ser como Jesús. Esto comienza con la doctrina porque al final del día somos lo que creemos. Si creemos cosas malas, tendremos un mal comportamiento. Usted nunca puede sobrepasar su fe básica, y jamás habrá un sustituto para una experiencia espiritual verdadera.
Nuestra forma de vivir, o estilo de vida, fluirá de nuestra doctrina. Así que cuando creemos lo correcto, nos comportamos correctamente. Cuando vemos a alguien que no se comporta como la Biblia enseña, estamos viendo a alguien que no cree lo que la Biblia enseña. Este buen comportamiento nos llevará a una vida de propósito. Compare esto con la búsqueda aleatoria de la felicidad y la satisfacción que representa la vida egoísta. Pablo tuvo una meta y prosiguió a la meta del supremo llamamiento. Nosotros también deberíamos hacerlo.
El propósito nos llevará a la ejecución. La fe de Pablo lo llevó a sufrir por la causa de Cristo. Él estuvo dispuesto a hacer sacrificios, aún a enfrentar el peligro y la muerte debido a que estaba viviendo una vida que era más grande que la búsqueda de tranquilidad personal. Es interesante que la paciencia y el amor verdadero surjan de una vida así. Es irónico que aquellos que buscan el amor por su cuenta, jamás lo encuentra; pero aquellos que se dan a sí mismos al Señor encuentran el significado y ponen en práctica el amor verdadero.
Ésta no era una mera teoría en Pablo. Él había sufrido y le recordó a Timoteo que el sufrimiento era real. En Antioquía y de nuevo en Iconio y luego en Listra, Pablo había sufrido físicamente. Bajo muchos parámetros modernos, Pablo había sido un fracaso. Él no era popular en muchos lugares. Era pobre y no satisfacía a los ricos ni poderosos. Fue fiel a su llamado y esa fidelidad fue una cura segura para el egoísmo.
Cuando somos llamados a sufrir por nuestra fe a nosotros también se nos recuerda que no debemos pensar que nos ha ocurrido alguna gran tragedia. La sencilla verdad del versículo 12 es que todos los que viven una vida piadosa sufrirán persecución. Esto debería llevarnos a analizarnos a nosotros mismos y a nuestros entornos. Si estamos muy cómodos en un mundo pecaminoso, necesitamos preguntarnos por qué.
Pablo le había dado a Timoteo un ejemplo a seguir, pero tam-bién fue claro al afirmar que aún si Timoteo no siguiera el ejemplo, las cosas no mejorarían. Los hombres malvados y los seductores empeorarían. Engañarían y serían engañados. Nosotros debemos esperar esto y debemos prepararnos para ello.

III. Una aplicación y un fundamento
2 Timoteo 3:14-­17

14. Pero persiste tú en lo que has aprendido y te persuadiste, sabiendo de quién has aprendido;
15. y que desde la niñez has sabido las Sagradas Escrituras, las cuales te pueden hacer sabio para la salvación por la fe que es en Cristo Jesús.
16. Toda la Escritura es inspirada por Dios, y útil para enseñar, para redargüir, para corregir, para instruir en justicia,
17. a fin de que el hombre de Dios sea perfecto, enteramente preparado para toda buena obra.

Nosotros tratamos con un creciente engaño y una seducción espiritual al retener las cosas que sabemos que son ciertas. Existe la gran tentación de siempre ver las cosas nuevas. Constantemente estamos bombardeados con lo nuevo y mejorado, pero especialmente en asuntos de doctrina siempre debemos estar firmes en lo comprobado y verdadero. Pablo amonestó a Timoteo a que siguiera creyendo y practicando las cosas que él había enseñado y que Timoteo recordara a quienes le habían enseñado.
Timoteo había aprendido las Escrituras en su niñez. Su madre y su abuela se las habían enseñado a él y él había absorbido las lecciones del Antiguo Testamento. Esto puso un fundamento sobre el cual Pablo pudo construir cuando llegó a esta familia. La enseñanza de la Palabra es la clave para la estabilidad y la salvación. La Biblia puede hacernos sabios para la salvación, pero nuestra salvación se produce por medio de nuestra fe personal en Jesucristo.
La Biblia no es un libro de sugerencias o una propuesta de una filosofía que debamos examinar ni aceptar o descartar. La Biblia es la Palabra de Dios a la humanidad. Se nos ha dado por inspiración. Literalmente Dios sopló la verdad en los hombres que escribieron las palabras a las que le llamamos Biblia. La Biblia es provechosa y útil para enderezar los caminos torcidos y para devolver los pies extraviados al camino de justicia. La Biblia es el único libro en el mundo en el cual encontramos instrucción en justicia así como Dios define justicia. La meta del estudio bíblico es que seamos completos, o perfectos. Ésta no es una perfección sin pecado donde nunca hacemos nada malo; es un entendimiento completo de la voluntad y del camino de Dios para que no sigamos el camino equivocado hacia una vida de inutilidad y destrucción.

UNA PALABRA FINAL

El propósito del estudio bíblico no es sólo el de entender la doctrina o poder defender nuestra fe. El propósito del estudio bíblico es el desarrollo espiritual personal del alumno. Es para perfeccionarnos y pulirnos para toda buena obra. El estudio bíblico jamás es meramente académico. Cuando leemos la Biblia, ésta nos cambiará. Quizás por esto es que muchos evitan estudiar la Palabra.
Es fácil especular que actualmente enfrentamos la declinación moral que se describe en estos versículos como nunca antes. Es difícil discutir que esto no sea cierto, pero tenemos que comprender que en el pasado ha habido momentos de gran angustia y confusión en el mundo. Los días que enfrentaba Timoteo eran días de gran dureza para los predicadores y también para las iglesias. Este consejo fue dado a un hombre verdadero en una situación real. Tiene una aplicación definitiva para los que viven hoy día como la ha tenido a través de los siglos.
El amor propio jamás pasará de moda en este mundo pecaminoso. En todos los siglos y en todas las situaciones sociales habrá muchos como los descritos en estos versículos. También existirá la necesidad de las defensas positivas que se enseñan aquí. La mejor manera, de hecho la única manera para evitar enfermarse es estar lo más saludable posible. Quédese tan cerca del Señor cuanto pueda y conozca, crea y practique la verdad de la mejor forma posible. Esto le pondrá en la mejor posición posible para conocer y derrotar los errores doctrinales basados en el egoísmo.

PARA DISCUSIÓN 

1. ¿Cree usted que estamos en los días postreros? ¿Por qué o por qué no?
2. Nombre y comente algunas características de los días postreros que prevalecen hoy día (2 Ti. 3:1­7).
3. ¿Cuán importante es para usted que la Palabra de Dios sea inspirada? Hable sobre las implicaciones de la inspiración.
4. ¿De qué manera la Palabra inspirada lo prepara enteramente para toda buena obra (2 Ti. 3:17)? ¿De qué formas específicas lo hacen las Escrituras ser completo?

Preparado por D. Robinson; COMITÉ BAUTISTA ESCUELA DOMINICAL de A.B.A.

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